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Alopecia, frizz y resequedad: los problemas capilares que afectan a las colombianas y cómo combatirlos

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La salud capilar es un tema prioritario para millones de mujeres en Colombia. Factores como el estrés, la mala alimentación y la exposición a herramientas de calor son algunos de los culpables de que problemas como la alopecia, el frizz y la resequedad sean cada vez más comunes. A continuación, exploramos estas condiciones y brindamos consejos prácticos para enfrentarlas.  

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¿Qué está causando la alopecia en las colombianas?  

En Colombia, más de dos millones de personas sufren de alopecia, según datos del DANE. Aunque históricamente se asociaba más con los hombres, esta condición afecta cada vez más a las mujeres: tres de cada diez colombianas enfrentan pérdida acelerada de cabello.  

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Angelica Quintero, cofundadora de La Poción, explica que el estrés laboral, muy presente en ciudades como Bogotá, Cali y Medellín, es uno de los principales desencadenantes. Además, factores como los cambios hormonales (embarazo, menopausia o el síndrome de ovario poliquístico) y deficiencias nutricionales agravan esta situación.  

La solución pasa por fortalecer el cabello desde la raíz. Los expertos recomiendan productos ricos en vitaminas, minerales y aceites esenciales como el de romero, además de tónicos específicos para combatir la caída y estimular el crecimiento.  

¿Por qué el frizz y la resequedad son tan comunes en Colombia?  

El frizz y la resequedad son problemas capilares típicos en regiones de alta humedad como la zona Pacífica y el Caribe. Esto ocurre porque el cabello absorbe la humedad del aire, causando encrespamiento y volumen descontrolado.  

Para controlar el frizz, los productos anti-frizz y los aceites hidratantes son aliados esenciales. También se recomienda usar acondicionadores sin enjuague y proteger el cabello con mascarillas hidratantes semanales que mantengan la humedad natural de la fibra capilar.  

¿Cómo afectan los procesos de coloración al cabello?  

Técnicas de coloración como el balayage, los highlights y los tonos rubios son tendencias populares entre las colombianas. Sin embargo, estos procedimientos pueden debilitar y resecar el cabello, dejando una fibra capilar frágil y vulnerable al quiebre. 

 

Angelica Quintero explica que los productos químicos utilizados en la decoloración afectan la cutícula, la capa externa protectora del cabello, lo que reduce la retención de humedad. Para contrarrestar estos efectos, se recomienda acompañar cualquier coloración con tratamientos reparadores que nutran y fortalezcan el cabello.  

¿Qué hábitos ayudan a mantener un cabello sano?  

Combatir estos problemas capilares requiere compromiso y una rutina de cuidado adecuada:  

1. Limpieza y nutrición: Usa champús y acondicionadores específicos para tus necesidades capilares. Prefiere los libres de sulfatos y parabenos.  

2. Hidratación constante: Aplica mascarillas o tratamientos hidratantes al menos una vez por semana.  

3. Protección contra el calor: Reduce el uso de planchas, secadores y rizadores, y utiliza protectores térmicos antes de exponer el cabello al calor.  

4. Alimentación balanceada: Consume alimentos ricos en hierro, biotina y ácidos grasos omega-3, esenciales para un cabello fuerte y saludable.  

5. Aceites esenciales: Integra productos con aceite de argán, coco o aguacate para sellar la humedad y revitalizar las puntas dañadas.  

Renovar la imagen sin sacrificar la salud capilar  

Con la llegada de las festividades de fin de año, es común querer transformar el look con cortes o coloraciones. No obstante, es fundamental priorizar la salud capilar. Los expertos coinciden en que un cabello bien cuidado no solo se ve mejor, sino que también es más resistente a los cambios y agresiones externas.  

Tomar medidas preventivas y mantener una rutina constante puede marcar la diferencia para enfrentar los desafíos capilares que afectan a las colombianas. Recuerda que un cabello sano es el reflejo de buenos hábitos y un estilo de vida equilibrado.

 

Felipe Torres Vargas

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